Este Barça ya tiene su remontada. El equipo azulgrana recuperó su mejor versión, de la que no hubo ni rastro en el partido de ida, y dio volteó el 2-0 de San Siro con brillo y trabajo pero con el sufrimiento justo. El Barça barrió al Milan, que no pudo repetir su partido perfecto de tres semanas atrás y queda fuera de los cuartos de final de la Champions.
El Barça comenzó con una fortísima presión, como en sus mejores días, sobre un Milan ya de por sí aculado. Un comienzo avasallador que sólo tardó cinco minutos en encontrar premio. Messi recibió junto a la frontal y aprovechó una mínima rendija para sacudir el balón a la escuadra. Visto y no visto, el Barça había andado ya la mitad del camino a la prórroga. Con 85 minutos por delante, el gran peligro era recibir un tanto.
El Barça no bajó el pistón. Infinitamente más directo que en el partido de ida, probó a Abbiati desde lejos y a punto estuvo de superarle. El veterano portero desvió fuera un tiro de Xavi y al larguero otro de Iniesta. Los nervios del Milan se multiplicaban, con errores infantiles en defensa, y sufría horrores no sólo para cruzar el centro del campo, sino incluso para acercarse. Un error de Mascherano propició la contra de Niang, que estrelló su disparo en el poste. Perdonó el joven delantero francés pero no Messi, acto seguido. Antes del descanso, la eliminatoria estaba ya igualada. Villa remató el trabajo en el 55, con un gran remate que Abbiati sólo pudo mirar.
Como era de esperar, el Milan dio varios sustos, en especial uno de Robinho a falta de diez minutos. Pero el Barça se defendió con su mejor arma, la posesión, y redujo los acercamientos italianos en los últimos minutos. En el descuento, cuando se esperaba la última y desesperada tentativa del Barça, Messi lanzó una contra y Alexis encontró Jordi Alba, al galope por la banda. El lateral superó a Abbiati con su habilidad ya característica y selló la remontada soñada.
fuente: Sportyou
No hay comentarios:
Publicar un comentario